Chofer de pipa a exceso
La explosión de una pipa en Iztapalapa continúa bajo investigación por parte de la Fiscalía de la Ciudad de México. Aunque el chofer del vehículo falleció, se ha señalado que la pipa circulaba a exceso de velocidad, pero aún se ponen en duda las conclusiones preliminares.
Investigación en curso
De acuerdo con la titular de la Fiscalía, Bertha Alcalde Luján, un dictamen inicial estableció que el vehículo iba a exceso de velocidad al tomar una curva en la autopista. Sin embargo, la dependencia aseguró que la indagatoria seguirá su curso “más allá del fallecimiento del conductor”. El caso busca determinar las responsabilidades de cada actor involucrado en el incidente que dejó 20 personas fallecidas y más de 30 hospitalizadas.
Trayecto de la pipa
La pipa de gas LP salió de Tuxpan, Veracruz, con destino a una gasera en Tláhuac. Al incorporarse desde la autopista México-Texcoco hacia la México-Puebla, perdió el control en una curva con pendiente. Según la versión oficial, el vehículo impactó contra un muro de contención, provocando la volcadura del contenedor y la posterior fuga del combustible.
Origen de la explosión
La Fiscalía explicó que la fractura del contenedor se originó en la parte frontal izquierda, lo que generó una fuga considerable. El gas se expandió hasta 180 metros antes de que una chispa produjera el incendio y la explosión. Se mencionó que la fractura pudo haber sido causada por un objeto rígido, aunque no se ha confirmado con certeza.
Reparación de daños
La empresa Silza, propietaria de la pipa, ya compareció y expresó disposición para cubrir los daños. Mientras tanto, la Fiscalía se hará cargo de los pagos de reparación. Además, el Gobierno capitalino anunció apoyos emergentes para familias de víctimas y lesionados, así como la creación de un Comité de Solidaridad con la participación de ONU, UNAM y Cruz Roja.
Medidas futuras
La jefa de Gobierno, Clara Brugada, adelantó que se presentarán nuevas propuestas para regular la operación de pipas en la Ciudad de México. Con ello, se busca evitar que un siniestro de esta magnitud vuelva a repetirse, aunque aún persisten dudas sobre si la causa fue realmente el exceso de velocidad o si existieron otros factores no esclarecidos.